De acuerdo con la información suministrada por la Fiscalía y la Dijin de la Policía, el hombre se encontraba viviendo en Barranquilla desde hace más de un año. Aquí buscaba personas en especial de escasos recursos, para convencerlas de llevar droga a Europa.
El hombre mantenía un bajo perfil para evitar ser detectado por las autoridades, pero mantenía activo su negocio de tráfico de estupefacientes hacia el viejo continente. “Convencía a las personas de viajar Europa con las sustancias ilícitas adheridas al cuerpo o escondidas en el equipaje», informó la Fiscalía.
Precisamente, dijo el ente acusador, «estaría involucrado en un caso conocido en el aeropuerto Roissy-Charles de Gaulle en París, en el que un técnico comercial de una aerolínea francesa fue capturado en flagrancia con 16 kilogramos de clorhidrato de cocaína, que pretendía sacar del baño de una aeronave que salió de Bogotá».